sábado, 22 de agosto de 2009

Notas de prensa

Diplomáticos se encierran en la embajada argentina en Honduras para resistir expulsión
Noam Chomsky y 92 académicos piden a Obama "medidas" contra los golpistas

Decepciona al lingüista que Human Rights Watch guarde silencio ante los "sintomáticos abusos"

Foto
Una indígena hondureña se encadenó en Tegucigalpa durante una manifestación por el retorno de Manuel Zelaya y la expulsión de los golpistasFoto Ap
Dpa y Afp
 
Una integrante de la etnia lenca se hidrata durante una manifestación en favor del presidente Manuel Zelaya, este viernes –cuando se cumplieron 55 días de movilizaciones contra el gobierno de facto–, a las puertas de la catedral metropolitana de Tegucigalpa Foto Reuters

Tegucigalpa, 21 de agosto. Un juez local autorizó la liberación de 24 miembros del Frente Nacional de Resistencia contra el Golpe de Estado detenidos recientemente en protestas callejeras disueltas por la policía, pero impuso a seis de "medidas cautelares" para estar bajo la supervisión de las autoridades, informaron fuentes judiciales, mientras que en el plano diplomático España anunció la expulsión del embajador hondureño en Madrid, José Eduardo Martell, por haberse pronunciado en favor del gobierno de facto de Roberto Micheletti.

La movilización popular en Honduras, que hoy sumó 55 días de protestas callejeras casi ininterrumpidas, fue el tema central de una carta firmada por el lingüista Noam Chomsky y 92 académicos de universidades estadunidenses, que se declararon "profundamente preocupados" por el silencio de la organización Human Rights Watch (HRW) en torno a los "sistemáticos abusos de los derechos humanos cometidos por el régimen golpista en las últimas seis semanas".

Es "decepcionante" que HRW sólo haya emitido un comunicado sobre la situación en Honduras desde el 8 de julio –10 días después del golpe de Estado– y no haya dado la señal de alarma "sobre los asesinatos extrajudiciales, detenciones arbitrarias, asaltos físicos y ataques a la prensa".

Los firmantes critican que el presidente Barack Obama no tome medidas más decisivas para acabar con el gobierno de facto, como sería "la cancelación de todos los visados y el congelamiento de las cuentas bancarias en Estados Unidos de los líderes del golpe".

También denuncian que Washington mantiene la ayuda en efectivo al gobierno golpista por intermedio del fondo del Milenio –la cuenta con la que se financian los planes de reducción de la pobreza– y entrena a cadetes militares hondureños en el Instituto del Hemisferio Occidental para la Cooperación en Seguridad.

Al menos dos de las manifestaciones de protesta de las últimas semanas fueron disueltas por la policía hondureña con gases lacrimógenos, golpes y persecuciones, con saldo de 24 detenidos.

El juez Esteban Quevedo otorgó el "sobreseimiento provisional" a 18 personas que acudieron a las protestas convocadas por el frente antigolpista. Los manifestantes fueron acusados de sedición, participación en protestas ilegales, robo y daños a propiedad privada, pero con la decisión del juez se extiende el plazo para presentar pruebas en contra de los individuos.

Entre los seis que quedaron sujetos a medidas cautelares se encuentra el colombiano Milko Durán Céspedes, originalmente identificado como venezolano.

En el terreno diplomático, la Organización de Estados Americanos informó haber sido notificada por el gobierno de España de la expulsión del embajador de Honduras en Madrid, "coherente con el compromiso de la comunidad internacional de mantener la interlocución oficial con el gobierno constitucional de Honduras".

Con la medida España se suma a Argentina en las acciones contra diplomáticos hondureños que han respaldado al gobierno golpista.

En Tegucigalpa, al vencer hoy el plazo para que todos los funcionarios de la legación argentina se retiren de Honduras, dos miembros de la misión se encerraron en la embajada por instrucciones de su gobierno desde Buenos Aires.

http://www.jornada.unam.mx/2009/08/22/index.php?section=mundo&article=020n1mun

Tiene 75 años y está en la lucha por expulsar al usurpador
Dionisia Díaz, la abuela de los zelayistas
Afp
 

Tegucigalpa, 21 de agosto. "Derecha, izquierda, golpistas a la mierda", exclama con un altoparlante una menuda mujer de 75 años, vestida de azul, que marcha con los partidarios del presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya. Es Dionisia Díaz, veterana de las lides obreras en Honduras.

"Estuve en la huelga del 54 y ahora contra estos malditos golpistas que han asaltado, han secuestrado la democracia", dice la mujer, colocándose el altoparlante bajo el brazo, antes de que parta la movilización antigolpista.

En las marchas del Frente de Resistencia contra el Golpe de Estado del 28 de junio se ve con frecuencia a la misma gente: no sólo a los dirigentes, sino la gran masa que lleva 44 días en las calles de la capital. Una de las que no falta es Dionisia Díaz.

"En la huelga del 54 perdí a mi esposo. Para huir de la represión, la gente se refugiaba en las montañas y él se fue a la montaña y nunca regresó", relata la mujer, que en ese entonces tenía 20 años.

La huelga de 1954 es reconocida como la mayor gesta de la lucha popular en Honduras. Fue un movimiento en la costa norte del país contra las trasnacionales bananeras que ponían y quitaban presidentes y finalizó con las mayores conquistas de los obreros.

Y 55 años después, esta mujer originaria de El Progreso, departamento de Yoro, ciudad rodeada aún por las plantaciones bananeras y situada a 240 kilómetros al norte de Tegucigalpa, enarbola de nuevo la bandera de los obreros.

A diario, Díaz, quien tiene cinco hijos, 18 nietos y siete bisnietos, es de las primeras en llegar a la Universidad Pedagógica Nacional, en el este de Tegucigalpa, donde empieza a motivar con su altoparlante a los demás congregados para la movilización.

"No vamos a detener esta lucha hasta que el golpista de Roberto Micheletti deje la presidencia al verdadero mandatario que elegimos los hondureños, que es Jo-sé Ma-nuel Ze-la-ya Ro-sa-les", dice con énfasis en cada sílaba.

"Conozco bien a Micheletti. Es de origen italiano. Era chofer de autobús, después tuvo una empresa de omnibuses y ahora es un gran empresario, que ha hecho lo peor: participar en un golpe de Estado", se queja la mujer.

"Desde el 28 (de junio) andamos aquí y no vamos a parar", sentencia la mujer, que se gana la vida con la venta de zapatos y ropa como comerciante informal.

http://www.jornada.unam.mx/2009/08/22/index.php?section=mundo&article=020n2mun

--
manitas negras
¡nunca se raja!
http://resistenciamorazan.blogspot.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario